HIDRATANTE PARA TU ALMA
Ahora bien, la fe es tener confianza en lo que esperamos, es tener certeza de lo que no vemos. (Hbr 11.1) Fe Julito llegó esa mañana a la escuela muy triste. La profesora al verlo le preguntó: - Julito, ¿Qué tienes hoy?. Él con la mirada baja y en voz suave, respondió: - Anoche, antes de dormir, llame a Dios y no me respondió. Lo busque en todas partes de la casa y no lo encontré, creo que Dios no existe. La maestra tomó a Julito de la mano y lo sentó frente a todos los niños y preguntó: - ¡Niños!, escuchen y respondan: - ¿Ven las manos de Julito?. -¡Siii, maestra!; - ¿Su cabeza? -¡También!; ¿Sus ojos?, - ¡Siii!. Entonces, las manos, la cabeza, los ojos y demás partes como estas, si existen porque las vemos. ¡Perfecto!, ahora, - ¿Ven el corazón de Julito?, - ¡Nooo maestra!. ¿Julito tiene corazón? - Siii, maestra. Aunque no veamos el corazón de Julito sabemos que esta ahí, lo sentimos, o sea existe el corazón de Julito. Así es es Dios. No lo vemos, pero lo sentimos, Él está ...